Resistencia a la Corrosión Superior y Longevidad
La excepcional resistencia a la corrosión de las tuberías y accesorios de acero inoxidable proviene de la capa pasiva de óxido de cromo que se forma sobre la superficie, proporcionando una protección continua frente a los factores ambientales. Esta capa protectora autorregenerable se renueva automáticamente cuando se daña, garantizando un rendimiento constante durante toda la vida útil del sistema. La resistencia del material va más allá de la corrosión común e incluye la corrosión por fatiga, la corrosión por picaduras y la corrosión intersticial, lo que lo hace adecuado para entornos exigentes como instalaciones costeras y plantas de procesamiento químico. La durabilidad inherente reduce significativamente la frecuencia de reemplazo y los requisitos de mantenimiento, generando importantes ahorros de costos durante el ciclo de vida del sistema. Esta característica es particularmente valiosa en aplicaciones donde la parada del sistema puede provocar pérdidas significativas de producción o problemas de seguridad.